Parecido a un enfermo paranoico una parte de su mente contenía las razones suficientes para pensar en la conspiración. En que las cosas se daban de tal o cual forma para llevarlo a aquellos niveles de completa confusión, eventualmente para frenarlo... frenar su mente ¿?.
Ahora aparecía, con rasgos que le transmitían confianza, pero las alarmas aun estaban conectadas, y el núcleo palpitaba con los pulsos de la traición. Una inyección directa había sido clavada en su vena, transportando la marea negra con la que se mezclaba la sangre terminando por generar la expresión; una marca que algunos intuían pero no podían ver.
"Esto es broma?" dijiste tentado de la risa. Primero el eco trajo en pequeñas repeticiones las palabras tranquilas con el viento, pero luego lo gritaste como si alguien te estuviera tomando el pelo.
No había nadie del otro lado escuchando, todo sería una historia contada. Una interpretación de un grano de arena escapado del tiempo.
Las preguntas que antes eran en broma comenzaron a ser serias... cómo conozco? cómo interpreto? cómo actúo? qué se supone que sienta? cómo puedo decir? cómo cambiar? cuál es la mejor forma de recordar? qué fue mentira y qué fue verdad?
La vida no tiene ningún miedo a mi mirada maldita. Ahora escupe despojos y los trae, pero ya no son las sobras de la dolencia, ahora son fragmentos necesarios para profetizarlo. Yo también fui un trozo llevado a conocer otras vidas.
Me había confundido pensando cuál es su plan? pero estaba equivocado del destinatario. Así que lo pregunto de nuevo a tu saber arrebatado. Cuál es tu plan?
"El mismo..." mencionó inalterado. "Vamos a cambiar la partida de la misma forma que cualquier pequeño cambio en las condiciones iniciales pueden provocar un caos en el sistema"